Hubo una etapa de gran despertamiento en Argentina, donde era usual que, por toques muy especiales del Espíritu Santo, dentro de las iglesias convivieran dos de manera paralela. Una, la tradicional, antigua, convencional y la otra, fresca, genuina, nueva y con una novedad muy singular: sin liderazgos humanos infalibles ni omnipotentes. De esa iglesia es de la que hablamos, lo…