Los creyentes sabemos perfectamente que nuestro desandar en la tierra será en base a uno de dos conceptos básicos espirituales de vida: en Cristo o en Adán. Son las únicas dos naturalezas posibles en este lugar, en este tiempo y en esta vida. De hecho, conforme a nuestra condición de seres creados con libre albedrío, la decisión respecto a qué naturaleza adoptar, es de cada uno de nosotros. Este trabajo te ayudará a tomar una decisión sabia y de fondo, ya que en ella te va nada menos que tu propia vida.