El Reino de los Cielos se ha acercado. Ese y no otro ni ninguna imitacion bien intencionada, fue el evangelio genuino que vino a predicar Juan el Bautista primero, y el propio jesús despues. Ese es el evangelio que hoy debemos levantar en alto y sustentar con palabra y oración para producir exactamente lo que dice el título, y que todavía no se está viendo en la iglesia.