ORACION: Señor... No queremos mas hijos de esclavitud, nacidos según la carne, sino hijos según tu gracia, para que sean para siempre libres.
INTRODUCCION: Abram era un hombre como nosotros, y lo vemos caer en una debilidad muy común en nuestros días. Aprendamos de la impaciencia de Abram, en no esperar la promesa de Dios y los tremendos problemas que esto le acarreó. Leer Gn.16:1 al 17-22, luego 21:1-14
FONDO HISTORICO: Dios había llamado a Abram a la tierra de Canaán, le había prometido que haría de él un pueblo grande y numeroso de donde vendría ¡El Salvador del mundo! Esta promesa dada por Dios, se demoraba demasiado para Abram, año tras año esperaba el nacimiento del hijo prometido, y no llegaba.
1- LA IMPACIENCIA DE ABRAM
Abram y Saraí su mujer, quisieron ayudar a Dios a cumplir su promesa. Planearon a través de su sierva Agar, darle una manita a Dios, y cuando Agar nota que está en cinta, comienza a turbar la paz del hogar.
De esta ayuda del hombre nació Ismael según la carne, pues Ismael no era hijo de la Gracia de Dios, porque intervino la idea de Saraí y la habilidad de Abram que a pesar de su vejez, aún podía ser padre. Abram tendría que haber esperado, y confiar en la promesa convencido, que Dios haría todo. Dios no le había dicho, Tú te multiplicarás, sino Yo te multiplicaré.
Al intervenir el hombre, arruinó todo el plan de Dios, y Dios tuvo que esperar 13 años para borrar todo vestigio de este apresuramiento, durante estos 13 largos años, Dios no habló con su amigo Abram. No cometamos el error de querer ayudar a Dios.
A través de la Biblia, muchos hombres quisieron ayudar a Dios: Moisés, golpeando la piedra, dos veces para que le diera agua, arruinando la figura de Cristo que sería golpeado solo una. Pedro, en el monte de la transfiguración, queriendo hacer pabellones, porque no sabía lo que hablaba; Jesús no edificó ningún templo, estaba preocupado en los verdaderos templos de carne y hueso.
Hoy también queremos ayudar a Dios; como a veces las entradas de dinero no son suficientes a través de diezmos y ofrendas, hemos implementado sustitutos tales como: Empanadas, tortas y los famosos choripán. Como también hemos inventado cursos para bautizar a los creyentes, demorando este paso de fe y obediencia, que debiera realizarse junto a la conversión.
No ayudemos a Dios, solo somos administradores y no dueños de la Gracia de Dios.
2- PERSONAJES DE ESTA HISTORIA
Y SU SIGNIFICADO, Gá.4: 22-31
Saraí: Tipo de La Gracia de Dios
Agar: Tipo de La Ley, esfuerzo humano
Ismael: Nacido según la carne
Isaac: Nacido según Dios
Agar: Engendra hijos que luego son echados fuera
Saraí: Engendra hijos que quedan en la casa para siempre
Ismael: Fruto del esfuerzo humano... Intervino el hombre
Isaac: Fruto del esfuerzo divino... Intervino Dios.
De estos dos hijos se formaron 2 pueblos y en toda la Biblia se mencionan sus peleas, que continúan en nuestros días con guerras permanentes.
Hoy tenemos estas dos clases de creyentes en la iglesia; los nacidos según la carne, producto del esfuerzo humano, y los nacidos según Dios, no por el esfuerzo humano sino directamente por obra del Espíritu Santo.
Por cierto, para el hombre es más fácil y seguro que dé fruto Agar la ley, a través de reglas y prohibiciones, que Saraí la gracia, la estéril.
Para la primera con nosotros es suficiente, para la segunda se requiere fe en Dios y paciencia para saber esperar.
Cuándo un pecador se acerca a ti ¿A quién recurres para hacerle un cristiano? ¿A Agar? ¿A reglas y mandamientos humanos? Tales como: No fumes, el pelo, la ropa, el vocabulario, etc. Entonces, nacerá según la carne y será producto tuyo nada más.
Debemos esperaren la gracia, Saraí; recurre a ella y darás a luz un hijo nacido de Dios y será hijo de la casa y no esclavo de reglas como era Ismael, que por no cumplirlas, fue echado fuera.
3- ¿PORQUE DEMORO DIOS TANTO
EN DARLES LA PROMESA?
No se las dio antes pues ellos eran un matrimonio tipológico, Isaac su hijo debía ser un tipo y ejemplo de La Gracia Pura de Dios. Dios hizo esperar a Saraí, aparte de ser estéril debía llegar a su vejez, también que Abram fuera viejo e incapaz de ser padre, para que todos supiéramos que Isaac, no había venido ni por el esfuerzo de Abram, ni por la capacidad de Saraí, sino completamente por la Gracia de Dios. Gracia, es cuando todo depende de Dios, así deben ser los hijos hoy, nacidos según Dios y no por el esfuerzo humano.
APLICACION: Si pensabas que al cielo tenías que ganártelo, cumpliendo ciertas reglas bíblicas o de la iglesia. Si pensaste que la salvación es fruto de tu esfuerzo para cumplir, ¡¡¡debes humillarte!!! Pues todo es de Dios Gracia por Gracia.
Pastor: No te apresures en obrar con las almas nuevas, no recurras a Agar, es más fácil, pero solo da hijos nacidos en esclavitud, que luego por NO cumplir, son echados fuera, ¡puedes arruinarlo todo!
Recordemos siempre: Salvación... Sanidad.... Consagración, todo es por Gracia.
Tu no debes gloriarte de nada, no depende de ti, sino de la Obra Gloriosa de Cristo en la Cruz, que da hijos que nunca se van de la casa pues son los ¡¡¡herederos de Dios!!!
Dios te bendiga
DANIEL REGONDI
CORDOBA, MARZO DE 1999
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INTRODUCCION: Abram era un hombre como nosotros, y lo vemos caer en una debilidad muy común en nuestros días. Aprendamos de la impaciencia de Abram, en no esperar la promesa de Dios y los tremendos problemas que esto le acarreó. Leer Gn.16:1 al 17-22, luego 21:1-14
FONDO HISTORICO: Dios había llamado a Abram a la tierra de Canaán, le había prometido que haría de él un pueblo grande y numeroso de donde vendría ¡El Salvador del mundo! Esta promesa dada por Dios, se demoraba demasiado para Abram, año tras año esperaba el nacimiento del hijo prometido, y no llegaba.
1- LA IMPACIENCIA DE ABRAM
Abram y Saraí su mujer, quisieron ayudar a Dios a cumplir su promesa. Planearon a través de su sierva Agar, darle una manita a Dios, y cuando Agar nota que está en cinta, comienza a turbar la paz del hogar.
De esta ayuda del hombre nació Ismael según la carne, pues Ismael no era hijo de la Gracia de Dios, porque intervino la idea de Saraí y la habilidad de Abram que a pesar de su vejez, aún podía ser padre. Abram tendría que haber esperado, y confiar en la promesa convencido, que Dios haría todo. Dios no le había dicho, Tú te multiplicarás, sino Yo te multiplicaré.
Al intervenir el hombre, arruinó todo el plan de Dios, y Dios tuvo que esperar 13 años para borrar todo vestigio de este apresuramiento, durante estos 13 largos años, Dios no habló con su amigo Abram. No cometamos el error de querer ayudar a Dios.
A través de la Biblia, muchos hombres quisieron ayudar a Dios: Moisés, golpeando la piedra, dos veces para que le diera agua, arruinando la figura de Cristo que sería golpeado solo una. Pedro, en el monte de la transfiguración, queriendo hacer pabellones, porque no sabía lo que hablaba; Jesús no edificó ningún templo, estaba preocupado en los verdaderos templos de carne y hueso.
Hoy también queremos ayudar a Dios; como a veces las entradas de dinero no son suficientes a través de diezmos y ofrendas, hemos implementado sustitutos tales como: Empanadas, tortas y los famosos choripán. Como también hemos inventado cursos para bautizar a los creyentes, demorando este paso de fe y obediencia, que debiera realizarse junto a la conversión.
No ayudemos a Dios, solo somos administradores y no dueños de la Gracia de Dios.
2- PERSONAJES DE ESTA HISTORIA
Y SU SIGNIFICADO, Gá.4: 22-31
Saraí: Tipo de La Gracia de Dios
Agar: Tipo de La Ley, esfuerzo humano
Ismael: Nacido según la carne
Isaac: Nacido según Dios
Agar: Engendra hijos que luego son echados fuera
Saraí: Engendra hijos que quedan en la casa para siempre
Ismael: Fruto del esfuerzo humano... Intervino el hombre
Isaac: Fruto del esfuerzo divino... Intervino Dios.
De estos dos hijos se formaron 2 pueblos y en toda la Biblia se mencionan sus peleas, que continúan en nuestros días con guerras permanentes.
Hoy tenemos estas dos clases de creyentes en la iglesia; los nacidos según la carne, producto del esfuerzo humano, y los nacidos según Dios, no por el esfuerzo humano sino directamente por obra del Espíritu Santo.
Por cierto, para el hombre es más fácil y seguro que dé fruto Agar la ley, a través de reglas y prohibiciones, que Saraí la gracia, la estéril.
Para la primera con nosotros es suficiente, para la segunda se requiere fe en Dios y paciencia para saber esperar.
Cuándo un pecador se acerca a ti ¿A quién recurres para hacerle un cristiano? ¿A Agar? ¿A reglas y mandamientos humanos? Tales como: No fumes, el pelo, la ropa, el vocabulario, etc. Entonces, nacerá según la carne y será producto tuyo nada más.
Debemos esperaren la gracia, Saraí; recurre a ella y darás a luz un hijo nacido de Dios y será hijo de la casa y no esclavo de reglas como era Ismael, que por no cumplirlas, fue echado fuera.
3- ¿PORQUE DEMORO DIOS TANTO
EN DARLES LA PROMESA?
No se las dio antes pues ellos eran un matrimonio tipológico, Isaac su hijo debía ser un tipo y ejemplo de La Gracia Pura de Dios. Dios hizo esperar a Saraí, aparte de ser estéril debía llegar a su vejez, también que Abram fuera viejo e incapaz de ser padre, para que todos supiéramos que Isaac, no había venido ni por el esfuerzo de Abram, ni por la capacidad de Saraí, sino completamente por la Gracia de Dios. Gracia, es cuando todo depende de Dios, así deben ser los hijos hoy, nacidos según Dios y no por el esfuerzo humano.
APLICACION: Si pensabas que al cielo tenías que ganártelo, cumpliendo ciertas reglas bíblicas o de la iglesia. Si pensaste que la salvación es fruto de tu esfuerzo para cumplir, ¡¡¡debes humillarte!!! Pues todo es de Dios Gracia por Gracia.
Pastor: No te apresures en obrar con las almas nuevas, no recurras a Agar, es más fácil, pero solo da hijos nacidos en esclavitud, que luego por NO cumplir, son echados fuera, ¡puedes arruinarlo todo!
Recordemos siempre: Salvación... Sanidad.... Consagración, todo es por Gracia.
Tu no debes gloriarte de nada, no depende de ti, sino de la Obra Gloriosa de Cristo en la Cruz, que da hijos que nunca se van de la casa pues son los ¡¡¡herederos de Dios!!!
Dios te bendiga
DANIEL REGONDI
CORDOBA, MARZO DE 1999
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