Venezuela es uno de los muchos países, en los cuales no ha caído el Avivamiento glorioso y regenerador del Espíritu Santo. Esta es la “cenicienta” entre las naciones, con respecto al mover de Dios. Según las estadísticas, sólo hay un 6% de evangélicos, de un total de aproximadamente 25 millones de personas. Esto es abrumador.